Solo
podremos ser tan extremos, si tuvimos un encuentro con la persona de Jesús. Su
luz nos trasforma en verdaderos discípulos y profetas de Dios.
Está
naciendo una generación profética, equipada con la fe de Abraham para creer en
las promesas de Dios; y el liderazgo de Moisés, para llevar al pueblo de Dios a
la libertad del Espíritu. Es un camino de vuelva a la esencia del evangelio,
que desde sus comienzos fue extremo en devoción a Cristo y obediente a la
voluntad del Padre.
Con referencia al libro "La Revolución de Elias" de Jim Goll - Lou Engle
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